ALGO TRIVIAL PARA EMPEZAR UN AÑÓ MÁS...

ALGO  TRIVIAL  PARA  EMPEZAR  UN  AÑÓ  MÁS...

Aun cuando parezca trivial la Ley de Murphy: "Si algo puede salir mal, seguramente saldrá mal", se ha comprobado su mandato en innumerables ocasiones a través de los años y centurias.  Ejemplos sobran y son de muy fácil entendimiento:

A) "Una embarcación de carga, construida hace sesenta años, con el casco erosionado severamente por las aguas salinas y habilitada rústicamente para transportar 300 pasajeros, zarpa de una escondida bahía del norte de África, quizá de Libia, llevando a bordo a 1,200 personas que ansiosas tratan de llegar a Europa en busca de una mejor condición de vida. De acuerdo a Murphy, esa embarcación no logrará atravesar el Mediterráneo y los afortunados pocos sobrevivientes habrán de ser llevados a una estación migratoria de Lampedusa. Desgraciadamente para casi todos los infelices pasajeros se cumplió la Ley y su sueño de una mejor forma de vida, se fue con ellos al fondo del mar."

B) "Un camión de doble eje, de hace treinta años y capacidad de carga de 18 toneladas, es sobrecargado al doble de sus especificaciones y confiado a un inexperto conductor de 20 años de edad con tres semanas de experiencia en el volante. Esa carga no llegará a su destino pues la inclinada pendiente vencerá la capacidad de los desgastados y sobre exigidos frenos y el vehículo caerá al barranco, cumpliéndose, además de la de Murphy, la inviolable Ley de la Gravedad".

C) "Don Inocencio, "Chencho", para los muchos amigos que abusan de su candidez, cuenta con uno que en especial resulta el más "cara dura" de todos.

 El pasado día 28 de diciembre, el amigo abusivo se acerca y casi al oído de don Chencho, le dice unas palabras cuidadosamente pensadas de antemano, ¡Oye. amigo!, hazme un gran favor, fíjate que mi carcacha de hace tres años se me desbieló por falta de mantenimiento y la reparación me sale como lumbre, tanto que pienso mejor rematarla como está y comprar una nueva unidad ahora que están en oferta de fin de año. Ya investigué en la agencia y sin ninguna dificultad me la sueltan a cinco años con unos intereses realmente moderados, solo que me piden un aval que sea propietario de un bien raíz libre de gravamen, yo se que con tu firma y tu reconocida seriedad, me llevo el carro que tanto necesito y no tengas desconfianza, no te voy a fallar. 

Don Chencho, hombre de carácter débil firma como aval y el resto de la historia es ocioso comentarlo, aunque la tentación me exige decir que don Inocencio perdió mucho dinero y tanto amigo como automóvil habrá que localizarlos ahora con ayuda de los policías. Afortunadamente pudo cubrir la deuda, porque de otro modo hasta su casa, libre de gravamen y al corriente del impuesto predial, hubiera quedado en peligro de perderla..."

Como dicen los creyentes: ¡Dios nos ampare!. Que tengan todo lo mejor de la vida, pórtense todo lo mal que puedan y no se arrepientan de nada, que al fin de cuentas de lo único que hay que arrepentirse, "mutatis mutandis," es de no haber bebido más champaña, lo dijo John Maynard Keynes.

Que los espíritus chocarreros y los bienhechores acólitos de Baco los acompañen y protejan.

Buen MMXVIII  memo.

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Imagen: Memo, chachareando en el mercado de pulgas, Bath, Reino Unido. 

    Foto por Guillermo Aranda-Menaⓒ2000