NOTITAS FAMILIARES

Mi abuelo Alfonso Aranda Guerra, tuvo un primo hermano muy querido, Luis Guerra que casó con una chica de Aguascalientes, Josefina Muñoz. Ambos procrearon dos hijos: el que sería general e ingeniero Raúl Guerra Muñoz, de reconocidos méritos en el mundo castrense y que casó con Carmen Ramírez chica también de Aguascalientes y prima del matador Alfonso "El Calesero" y de su hermano el actor Ernesto Alonso. La hija, Bertha Guerra Muñoz, casó con el profesor Juan Manuel Solalinde, quien tenía una prestigiada Academia Comercial frente al Parque Salesiano de la Colonia Anáhuac.

Raúl y Bertha Guerra Muñoz, no obstante ser primos en segundo grado de mi tía Catalina y de mi papá, siempre mantuvieron entre ellos una relación familiar de cálido afecto.

En el año de 1955, completamente desorientado y sin ninguna vocación por la carrera militar, intenté tomar por el camino de las armas; mi tío Raúl me hizo el enorme favor de recibirme en su casa de Lago Catemaco 17, relativamente cerca del antiguo Colegio Militar a donde fui a presentar mis exámenes de admisión. Pero aún más grande que el favor de recibirme, fue la serie de consejos de mi tío Raúl para que desistiera de tan equivocado intento. Creo que no vio en mi ninguna facultad y de inmediato percibió que ese no era mi camino, cuánta razón tenía, no puedo siquiera imaginarme vestido de soldado.

En la noche, en sobremesa de la merienda, contaba mi tío Raúl sabrosas historias y anécdotas revolucionarias que con mucha atención oíamos Adriana, Héctor, Sergio y María Elena sus hijos y yo, el primo Memo. Entonces, el Mayor Guerra del ejército, desempeñaba el cargo de Director de la Fábrica Nacional de Medicinas, dentro de la Industria Militar que a su vez dirigía el general Francisco L. Urquizo, brillante escritor que dejó una obra importante; dos libros del general Urquizol me regaló mi tío Raúl: <Tropa Vieja> y <Clipperton, o la Isla de la Pasión>, que por desgracia no se a donde fueron a dar; otro obsequio que si conservo, es un libro cubano de trigonometría de un capitán Peredo, tan didáctico como los del gran matemático Agustín Anfossi.

La carrera de mi tío Raúl fue en ascenso lo mismo que la importancia de sus cargos, ya general fue nombrado Director de la penitenciaria de las Islas Marías y nunca lo fui a visitar durante su gestión y creo que ya ni como interno conoceré esas bellísimas islas.

Yo seguí mi camino dando bandazos y como el burro que tocó la flauta fui a dar a la Facultad de Economía de mi bien amada UNAM, donde me gradué en 1970 y de la que tengo muchos gratos recuerdos de profesores y compañeros.

De mi tía Bertha Guerra y del profesor Solalinde guardo el recuerdo de una pareja muy unida que supo formar una familia de valores éticos e intelectuales sobresaliente. El mayor de sus hijos, mas o menos de mi edad, tenía mucha habilidad para la mecánica automotriz y me enseñó a "poner a tiempo" y a cambiar velocidades con "doble clochazo" al viejo automóvil de los años veinte en que de repente pasaba por mí para ir a dar la vuelta por la Calzada México Tacuba hasta el Árbol de la Noche Triste, ...donde lloró el español.

El menor de los primos Solalinde tendría unos diez años de edad, razón por la cual no hubo alguna convivencia. Él si con una férrea vocación, siguió el camino espinoso del sacerdocio. Todos hemos oído la meritoria trayectoria y la absoluta entrega del padre Alejandro Solalinde Guerra para echarle la mano a esos seres desarraigados que van camino del norte buscando un pan para sus hijos, aunque en el tren pierdan la vida. Con nada podría abundar los profundos estudios en torno a la obra del padre Solalinde, lo único que si puedo decir es que me da gusto que haya personas como él que aun poniendo su vida en riesgo, desinteresadamente, se atrevan a enfrentar tan enorme labor humanitaria.

Que tengan buen día,
memo.

P.S.- Otro día les platico de mi tío Hugo Aranda, vecino de San Pedro de los Pinos, charro de a de veras, y de su yegua alazana que tenía muy consentida en la sala de su casa.

Imagen: GAA recibiendo su titulo de Licenciado en Economía por la Universidad Nacional Autónoma de México. Guillermo Aranda Alonsoⓒ1968